Castillo de San Blas

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El castillo de San Blas sorprende a quien lo va a visitar por el estilo fantasioso con el que está construido y es que visitar este «castillo» es transportarte a un escenario de época.

Antes de comenzar debes saber que el Castillo de San Blas es fruto de un sueño. Su creador, Paciano Ucieda Quiroga, era un mecenas cultural y dueño de una gran parte de Campo. Por indicaciones de Daniel Valdés, puso en marcha el proyecto.

Una noche, soñó cómo llevar a cabo el mismo, y entre sueños recordó el Castillo de los Templarios de Ponferrada y el castillo que está ubicado en Cornatel (tenéis información en este enlace). La inspiración hizo acto de presencia.

Una vez despierto tuvo todo claro. En la finca, donde estaba previsto levantarse el edificio, había que hacer unas torres como las del castillo medieval. Estas tenían que ser ligeras, tal y como las había imaginado en el sueño. Eso sí, tendría que ser cerca de la orilla del río Boeza.

El foso también apareció en el sueño, y este tenía que estar entre la frondosidad del lugar, donde los cisnes y aves acuáticas podrían disfrutar a sus anchas. De esta manera todo estaba planeado para construir un criadero, un inmenso estanque y un canal al más puro estilo veneciano.

Poco a poco lo que comenzó como un sueño, se fue convirtiendo en una gran realidad, que desgraciadamente, en la actualidad no se encuentra en el mejor estado. A pesar de ello, sigue conservando un encanto único y singular que estoy seguro te encantará.

El castillo de San Blas lo forman tres torreones neogóticos que imitan a un castillo a escala reducida. También dispone de un mirador a pie del río que nos ofrece un asiento sombrío donde relajarnos con el sonido del agua que baja por el Boeza. Al ir con niños pequeños hay que tener especial cuidado ya que las escaleras que suben a los diferentes torreones no disponen de barandilla y alcanzan una altura suficiente para darnos un susto.

 

Cómo llegar al Castillo de San Blas

Para llegar, hay que pasar el puente sobre el río Boeza y girar a la derecha en el desvío de Campo, se desciende un poco y a mano derecha, antes de llegar al desvío de la Residencia de la Tercera Edad de la Fundación Fustegueras, encontraremos un camino que en apenas doscientos metros nos va a llevar a la finca de recreo de la familia Valdés.

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